Me apunté a un concurso que de Ediciones Dauro en Facebook en que el premio era un ejemplar del libro "Monólogos con maniquí" de Antonio César Morón. No conocía al autor, pero la sinopsis y el tipo de relato me interesaron mucho, ya que yo mismo, en mis pinitos escribiendo soy muy proclive a escribir monólogos, delirios, sueños o cosas similares. Tuve la suerte de que me tocara y me puse con él nada más llegar. La sorpresa ha sido grata porque tanto la forma y estilo de escribir del autor como los temas de los monólogos resultan muy interesantes.
Autor:
Antonio César Morón (Cádiar, Granada, 1978). Dramaturgo, poeta y ensayista. Doctor en Teoría de la Literatura y Literatura Comparada por la Universidad de Granada, en donde trabaja como profesor. Ha publicado recientemente un conjunto de cinco monólogos bajo el título de Monólogos con maniquí (Granada, Dauro, 2012) que comprende los siguientes títulos: Los hombres interrogan a la muerte, Amada azul, Lasciate ogni speranza, Herencia de la desidia y El pendejo electromagnético.
Se suma a esta producción un conjunto también de cinco obras agrupadas bajo el título de Estado antimateria. Pentarquía de dramaturgia cuántica (Melilla, Consejería de Educación / GEEPP Ediciones, 2011), que comprende los títulos Dámada, Renacimiento, Mariana Pineda, Lady Pichica y La Tata Macha.
Su producción se incrementa con dos trilogías de teatro, una de comedias, Retórica del sueño de poder (Melilla, Consejería de Educación / GEEPP Ediciones, 2011) que engloba los títulos Pitas Payas, Academia e Índice de siluetas, y otra de tragedias, El metal y la carne (Melilla, Consejería de Educación / GEEPP Ediciones, 2010) que engloba los títulos Aullido de títeres, Tránsito para un azar y Triángulo escaleno.
Ha publicado también obras de teatro sueltas como la comedia Siseos de venganza (Melilla, Consejería de Cultura, 2009) o la tragedia Eurídice (Melilla, Centro UNESCO de Melilla, 2011). Su doble vertiente de investigador y creador toma cuerpo en el libro titulado La dramaturgia cuántica. Teoría y práctica (Granada, Dauro, 2009), que recoge un ensayo en donde se exponen las bases teóricas de esta nueva técnica dramática ideada por el autor, además de una práctica dramática siguiendo dicho paradigma, que lleva por título Dámada.
En 2008 crea y dirige el Grupo de Teatro Universitario ACTÚA (más tarde integrado dentro del Aula de Artes Escénicas del Centro UNESCO de Melilla) y con el mismo dirige los montajes de Siseos de venganza (Facultad de Educación y Humanidades de Melilla, 2009), Tránsito para un azar (Facultad de Educación y Humanidades de Melilla y Facultad de Educación de Granada, 2010), Índice de siluetas (Palacio de Congresos de Melilla, 2011) y Dámada (Palacio de Congresos de Melilla, 2012).
Como investigador y teórico del teatro ha publicado, además del ya citado ensayo de La dramaturgia cuántica. Teoría y práctica (Granada, Dauro, 2009), Teatro y sentido. La interpretación frente a sus límites (Granada, Dauro, 2007), La escena y las palabras. Ensayos de teatro y dramaturgia (Granada, Zumaya, 2010), y la que fue su tesis doctoral José Martín Recuerda en la escena española (Granada, Universidad de Granada, 2007). Dentro de su producción poética destaca la obra Fragor de incertidumbre (Granada, Port-Royal, 2009). Y como investigador acerca de la poesía contemporánea española cabe citar su libro El Grupo Ánade de poesía (Granada, Port-Royal, 2011 y Granada, Dauro, 2006).
Datos técnicos:
Autor: Antonio César Morón
Editorial: Ediciones Dauro
Encuadernación: Rústica con solapas
Tamaño: 15 x 21 cm
Páginas: 148
Fecha de publicación: 01/05/2012
ISBN: 9788496677517
Precio: 12,00 euros
Sinopsis:
(de la web de la editorial)
Monólogos con maniquí es un complejo y original proyecto dramático bajo el que se recogen los siguientes títulos: Los hombres interrogan a la muerte, Amada azul, Lasciate ogni speranza, Herencia de la desidia y El pendejo electromagnético. Soliloquios narrativos e intimistas de cada uno de los personajes, que exponen, a través de su propia voz, una problemática individual que les hace desarrollar una reflexión crítica acerca de su propia condición tanto circunstancial como psicológica.
El autor ha querido explorar en este libro la dimensión emocional, lo que el ser humano no conoce de sí mismo porque está integrado en un subconsciente que solo aparece en determinadas circunstancias: el momento previo a la ejecución de un ataque terrorista, la pérdida de aureola de una amada idealizada, el temor corrosivo al contagio de una enfermedad, la marcha de un hijo a una guerra sin sentido, y el deseo de un anciano por perpetuarse a través de la reencarnación en un objeto.
En estos ingeniosos monólogos nos encontramos ante una galería sorprendente de personajes y mundos que se debaten entre la realidad y el sueño, ante la cual el lector será hipnotizado con la única razón del mejor conocimiento de sí mismo.
Mi opinión:
Bueno, no conocía al autor a pesar de que tiene bastantes obras ya publicadas, y me ha sorprendido gratamente como ya dije antes. Me gusta mucho el monólogo, y la verdad es que Morón lo hace muy bien. El estilo es muy cuidado y directo, a la vez que delirante y surrealista a veces. En otras ocasiones incluso el lector puede llegar a sonreír. Además, cada uno de los monólogos nos pinta personajes con los que en todo o en parte el lector puede sentirse identificado, porque, por ejemplo, ¿quién no ha sentido celos cuando su pareja le cuenta el número de personas con quien se ha acostado? Y como esta podría hacer un par de docenas de preguntas retóricas que nos llevarían a la conclusión de que los personajes de este libro son tan humanos y tan parecidos a nosotros, que les pondríamos nuestra propia cara.
Por cierto, que el libro cuenta con una magnífica introducción de Cristina Hernández González.
Creo sin duda que es un libro muy recomendable para todos, porque retrata la sociedad actual de una manera elegante, cruda y realista. Me comprometo a leer más a Antonio César Morón porque me ha parecido de lo más interesante.
Gazapos, errores y otras cosas:
Bueno, pues además, estoy contento porque me he encontrado un libro pulcramente escrito y sin errores lingüísticos. Sólo he encontrado una errata en la página 69, donde dice "escharcha" en lugar de "escarcha".
Siendo de Granada y viendo la impresión que te ha causado lo tendré en cuenta.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias
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