Anna Tarrés, ¿la bruja del cuento de hadas?

Anna Tarrés. Fuente: 20minutos.es

Pues sí, llevamos bastantes años en que las chicas de la natación sincronizada española no se bajan del podio en los campeonatos europeos, mundiales y olímpicos. Medallas conseguidas con mucho esfuerzo, tesón, renuncia... Estas chicas deben someterse a una disciplina que seguramente dejaría a la altura de los talones a muchos cuerpos militares. Y por supuesto que las personas responsables de ellas no pueden permitir alegrías. No es sólo entrenar muchas horas, gimnasio, piscina, danza, carrera... Es alimentación rozando el límite de lo admisible, es no poder salir cuando tienes la edad en que lo único que cuenta es eso... Es sobre todo, y como decía antes, renuncia.

Paola Tirados.
Fuente Canarias 7.es

Y en estos casos se imponen regímenes más o menos dictatoriales en los que las chicas entran porque quieren triunfar. Nadie les pone una pistola en el pecho para ingresar en el equipo nacional igual que nadie les obliga a quedarse si piensan que el trato es humillante o inaguantable. Pero las chicas quieren esas medallas, quieren la gloria y trabajan para conseguirla, más que nadie, con una voluntad que estoy seguro la mayoría no tenemos ni por asomo. Algunas se quedan en el camino, pero eso es ley de vida y pasa en todos los órdenes de la vida. Las que acaban subiendo a lo más alto, las que acaban ganando, dan por bueno todo el esfuerzo, el sacrificio y hasta el régimen dictatorial que puedan haber sufrido.

El equipo en acción. Fuente rtve.es

Digo todo esto porque a la que ha sido durante quince años seleccionadora de natación sincronizada, Anna Tarrés, no sólo ha sido destituida sino que está siendo atacada, maltratada y vejada por ex nadadoras, periodistas y gente en general, con la "bendición" de la Federación Española de Natación que no mueve un dedo para atajar todo lo que se está diciendo y escribiendo. Entiendo como dije arriba que el régimen disciplinario de un deporte como este -también pasa en la gimnasia y ha habido problemas parecidos- es muy duro, durísimo. Y en un sistema "democrático" como este en que vivimos, en que los padres ya no imponen disciplina a sus hijos sino que negocian con ellos, parece que no está bien visto que se actúe de esta manera. Pero creo humildemente que no hay otra opción porque las chicas son jóvenes y si para mantener la forma, por ejemplo, no pueden comer chocolate, debe prohibirse, porque la rebeldía de la juventud no entiende de prohibiciones y las chicas comerán chocolate al más mínimo descuido.

Pero sobre todo, me parece mal, muy mal, que las ex nadadoras salgan ahora, cuando Tarrés ha sido destituida, a contar las vejaciones que sufrieron cuando estaban en el equipo. ¿Por qué no lo dijeron antes? ¿Por qué no hablaron cuando estaban dentro del equipo y ganando medallas o con posibilidad de hacerlo? Creo que es oportunista y que, si realmente recibieron ese trato que afirman, debieron denunciarlo en caliente, no ahora cuando la seleccionadora ha caído. La natación y el deporte español le deben mucho a esta mujer como para tratarla así justo en este momento.

La carta de la denuncia