Anoche daba comienzo la gira del nuevo disco de Vega "Wolverines", y lo hacía en la sala madrileña BUT, casi a rebosar de gente. Por supuesto, no podía faltar a esta cita para confirmar lo que ya sabía. En efecto, como le dije en la presentación, ya no me sorprende, y no lo hace porque sé que cada disco, cada concierto, cada minuto que pasa, Vega mejora y hace algo más, algo nuevo. Como sé que ella es tan madridista como yo, para ella va el ejemplo, y creo que voy a llamarla así desde ahora: es la Felipe Reyes de la música. Igual que el capitán del Madrid de baloncesto cada año va mejorando en lo que tiene dificultades, Mercedes es cada día más Vega, más artista, mejor música, mejor compositora y mejor cantante. Por tanto, cuando escucho una nueva canción no me sorprende, me gusta, pero no me sorprende que sea mejor que las de discos anteriores.
El disco es muy completo —iba a hacer na entrada sobre él, pero la actualidad manda—, más que "La cuenta atrás", que ya me pareció un disco muy sólido y con pocas divergencias en lo musical. En esta ocasión, "Wolverines" es un disco más compacto todavía, con unas letras todavía más potentes y elaboradas, y en lo musical, un paso más, con influencias que abarcan el rock de los setenta y el pop de los ochenta, y por supuesto, como siempre, su toque especial. Por su belleza, destacan temas como "Martes", donde hace un guiño a la música tradicional y "El funeral". Por las letras elaboradas, y para mi gusto, "Héroes antagónicos" y "La conjura de los necios". Y por supuesto, temas muy de Vega, muy de toda la vida, como "Treinta y tantos". La guinda en el pastel la pone la colaboración de su admirado Raphael en el dúo "Wolverines". Ciertamente, como ha dicho ella, una canción que está hecha para escucharla en la voz del de Linares. Además, la idea de recuperar el vinilo, para los que crecimos con él, es una auténtica gozada. Gran producción de Sebastian Krys con el que Vega forma un gran tándem.
En cuanto al concierto, fue desgranando los temas del nuevo disco salpicados dentro de un repertorio cada vez más cuidado y bien elegido. Ahora tiene material para elegir lo que canta en directo y la verdad es que está muy bien hecho. A los que nos gusta tanto siempre nos faltarán canciones, pero los conciertos no pueden durar cinco horas, como es lógico, y es mejor quedarse con algo de hambre que reventar de hartazgo, ¿no creéis?
El sonido de la sala no era demasiado limpio, pero sí se puede ver que el grupo es compacto y suena muy bien. Basado en las guitarras de un magnífico músico como es Kike Fuentes, en esta gira parece que Vega ha encontrado la formación perfecta para ella. Su mejoría con los teclados hace mucho más vistoso el directo y cada vez está más suelta encima de las tablas. En el concierto de anoche la noté más relajada que nunca. Es como si esta aventura que ha decidido afrontar en solitario, sin casas de discos ni intermediarios detrás, y tan solo acompañada de los suyos, hubiera liberado a Vega de muchas ataduras. La vi muy bien de voz y de movimiento en escena, como nunca antes la había visto en conciertos grandes. Versiones un poco distintas de algunas de las canciones, para darles un aire más actual, y una potente versión de "Como yo te amo" que popularizaron Rocío Jurado y Raphael. Al final, en efecto, me quedé con ganas... No nos acercamos a La Tita Rivera en esta ocasión, aunque me hubiera gustado pasarme para felicitarla en persona. Pero ella ya sabe que estoy cerca y feliz por verla tan bien.
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Gran concierto de Vega, si señor! Buena música y mejor compañía.
ResponderEliminarQué gran país es ese donde estaba La Casa de San Jamás!!
José, muchas gracias por la foto que nos hiciste.
De nada hombre. Un placer... .;)
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