Sí, ya estamos en jornada de reflexión. Ha sido una campaña curiosa. Todos han puesto toda la carne en el asador para conseguir los votos de los indecisos. Eso sí, nada de mítines clásicos, sino fiestas con juegos infantiles, actividades lúdicas y poquito de propuestas de verdad.
He tenido oportunidad de pasar por algunas de estas "fiestas-mitin" de las distintas formaciones que concurren a los comicios, y me queda una sensación de que todo sigue igual y de que los nuevos partidos son iguales que los otros... Me pregunto y me sigo preguntando: ¿a quién c... voto yo?
Porque cada uno busca el voto, unos para quitar de en medio a los que están y otros para que no les quiten de en medio, pero me da la sensación de que los ciudadanos, en el fondo, les importamos un bledo. Unos prometen lo irrealizable, otros reculan de sus posturas iniciales conscientes de que si las mantienen y por alguna casualidad gobiernan, no podrán cumplir. Los que parecen no tener posibilidades, también quieren su cuota para estar ahí, figurar y salir en la foto...
Y entre otras muchas cosas, me fijo en la estética, el marketing, la publicidad de cada uno. El PP cambia el azul por el verde y reduce a la mínima expresión la presencia de los logos de partido, como diciendo que se desmarcan de las políticas generales de partido. Los del PSOE dan una vuelta a toda su estética y presentan candidaturas jóvenes y sin ninguna experiencia en la mayoría de los casos, para tratar de enganchar a ese electorado que les ha votado pero que se está pensando si hacerlo o no.
Izquierda Unida, UPyD y otras formaciones con su pequeña cuota de votos, como abanderados de la oposición más radical, pretenden vender que es gracias a ellos que se han destapado casos de corrupción y quieren arrogarse la bandera de la honestidad. Pero no han cambiado nada. No han sabido renovarse para presentar una cara nueva que ilusione a posibles votantes.
Ciudadanos, ese partido que todos sabemos que se encuadra en la derecha y más cercano al PP que a otra cosa, da la sensación de que lo forman los descontentos del partido de Rajoy. Quieren vendernos que dentro de este modelo que tenemos pero con ciertos cambios, la cosa mejorará. Bien vestidos, correctos en el lenguaje, pero dan la sensación de que no hay nada nuevo bajo el sol.
Y Podemos... Aquí sí que hay algo que no entiendo: ¿Hay que ir de guarros por la vida para promover cambios en la sociedad? ¿Hay que ir con el pelo largo y mal peinado, con pinta de no lavarse, barba sin arreglar y ropas llenas de mierda para promover un cambio en la sociedad? ¡Es que dan sensación de oler mal desde lejos! Han reculado en muchas de sus propuestas iniciales y ahora ya no dan tanto miedo salvo, como digo, en la estética. Me dieron un programa del partido que era un periódico arrugado que parecía haber contenido un bocadillo de sardinas...
En definitiva, que sigo reflexionando porque propuestas de verdad, serias y que se puedan llevar a cabo, no veo ninguna. ¿Y sabéis qué es lo peor? Que esto es como un combate de boxeo por el título mundial. El campeón no tiene que hacer más que igualar lo que haga el aspirante para retener el título. El aspirante debe hacer mucho más que el campeón si quiere arrebatárselo. Y me da la sensación de que ninguno de los aspirantes a hecho lo suficiente en este combate y que, por mucho que nos pese a los españoles, el campeón, sonado y fuera de forma, retendrá el título una vez más...
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