Esto de estar tan liado con el trabajo y otras cosas hace que uno a veces no se entere de las cosas a su debido tiempo, y es lo que me ha pasado en esta ocasión. Ayer falleció uno de los grandes del rock de todos los tiempos. Formó parte de bandas tan míticas como Elf, Rainbow, Black Sabbath, Dio y últimamente Haevan and Hell. Ronnie James Dio ha marcado una época durante los últimos 40 años y nos deja vícitma del cáncer a la edad de 65 años -hubiera cumplido 66 en julio- y todavía en activo con su última banda. Incluso creo que tenía previsto pasar por España este año, pero como suele pasar en estas ocasiones, la mierte se empeña en cancelar esa ansiada gira para que los incondicionales se queden con las ganas, y convertir al artista en mito.
El otro día hablaba en la comida con mi amigo y compañero Diego Rodríguez, guitarrista de "Desastre" y comentábamos cómo la gente joven empieza a conocer a estos grandes de la música y se dan cuenta de que ya han muerto o están retirados. Tal vez lo grave es que no surgen suficientes nuevos talentos como para tomar el relevo y gente como Dio están muy por encima de los músicos actuales. Aunque si somos justos, ¿quién sabe si los músicos actuales no serán leyenda en treinta años? Es difícil que aparezca otro Ronnie James Dio, pero nos queda su música. Ya sé que es un tópico, pero es la verdad...
No se van los mejores, nos vamos todos, y en esta ocasión, le ha tocado a él. Antes o después, todos nos reuniremos para volver a escuchar a los grandes en algún lugar... ¿o no?
si Pepe,todos nos vamos y algunos nos rencontramos
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