sábado, 6 de marzo de 2010

Entre Pinto y Valdemoro

Supongo que todos conocéis esta expresión, que generalmente se emplea como símbolo de duda en la elección entre dos opciónes. También se utiliza cuando uno no está muy bien de salud o cuando uno está borracho, pero no demasiado. Y son bastantes las leyendas que corren por ahí sobre el origen de esta frase. Dependiendo de si se es de Pinto o de Valdemoro, la leyenda cambia un tanto por la "rivalidad" entre ambos pueblos, pero en esencia, son iguales. Y vamos con ellas:

1. Se cuenta que había un arroyo entre ambas localidades madrileñas, y que un borracho se dedicaba a saltar de una orilla a otra, gritando "¡Ahora estoy en Pinto!", "¡Ahora estoy en Valdemoro!", hasta que en una ocasión cayó en el arroyo y gritó: "¡Ahora estoy entre Pinto y Valdemoro!". Poco fiable esta leyenda porque, que se sepa, jamás ha habido un arroyo o riachuelo entre ambos pueblos.

2. Cuentan que un rey debía descansar antes de llegar a Madrid en uno de los dos pueblos, pero para no agraviar a ninguno de los dos, ordenó que se montara un campamento entre los dos pueblos, para que pudieran agasajarle ambos. Es evidente que cada uno quería que el rey probara lo mejor de sus vinos, y cuando estaba bastante achispado y uno de sus ayudantes le preguntó cómo se encontraba, el rey contestó: "¡Entre Pinto y Valdemoro!". Divertido origen para el significado que tiene que ver con la ebriedad.

3. También relacionado con la realeza, se dice que había una casa de mala reputación entre ambos pueblos, que un rey de los Austria frecuentaba con asiduidad. Cuando alguien preguntaba por el rey, y para no decir que estaba de putas, se decía que estaba "entre Pinto y Valdemoro". Aquí si que es cierto que ha habido siempre una casa de mala repotación entre Pinto y Valdemoro.

4. Otra controversia habla de los vinos de Pinto y Valdemoro, y en esta opción, lo que dice la leyenda es que en tiempos de los Austria -igual que en la anterior-, los vinos de un pueblo eran muy buenos y los del otro muy malos, siendo los primeros los que se consumían en la Corte. Cuando un vino no era ni bueno ni malo, se decía que estaba "entre Pinto y Valdemoro". La realidad es que es muy difícil que de dos pueblos que están al lado y cuyo suelo es similar, se obtengan unos vinos buenísimos y otros malísimos. Los vinos de esta zona, por lo que he podido averiguar, no eran malos del todo, pero dudo que en la Corte de los Austria se sirvieran los vinos de ninguno de los dos pueblos. Volvemos a la rivalidad.

5. La versión histórica, la más probable para la expresión, es la siguiente: Durante el siglo XII abundaban los enfrentamientos entre los nobles por la propiedad de comarcas vecinas e incluso lejanas. El que nos interesa aquí es el que mantuvieron el Obispo de Palencia y las ciudades de Segovia y Ávila con Madrid, por incluir en sus respectivas demarcaciones las tierras de Pinto y Valdemoro. Hasta tal punto llegaron las cosas que el mismísimo rey Alfonso VII, el 7 de febrero de 1184, tuvo que tomar cartas en el asunto, asistiendo personalmente a la colocación de mojones en las lindes entre Pinto y Valdemoro. Sin embargo los enfrentamientos entre Madrid y Segovia no terminaron. Años mas tarde, el 20 de julio de 1259, y siendo ya rey Fernando III el Santo, debe tomar la decisión con carácter irrevocable de asignar Pinto a Madrid y Valdemoro a Segovia. Fue entonces, y en su presencia, cuando se colocaron 42 nuevos hitos, algunos visibles hoy en día. Es probable que el rey pasara varios días en la Casa de Postas que existía en la línea divisoria, mientras se colocaban los hitos. Y seguramente aprovecharía para degustar los buenos quesos, embutidos y vinos que por aquel entonces hacían famosa a la comarca, amén de pasar buenos ratos con las gentes del lugar. Por eso cuando en la Corte alguien preguntaba "¿Dónde está el rey?", los cortesanos en tono bromista contestaban con la famosa frase: "¡Entre Pinto y Valdemoro!"



Seguramente hay más, y si conocéis alguna, os agradeceré que las incluyais en las opiniones. Entre Pinto y Valdemoro, pero en el término municipal de este último pueblo, lo que hay es una cárcel, el Centro Penitenciario Madrid 3, que también tuvo su polémica antes de su construcción, porque fue ofrecido a Pinto, y cuando el Ayuntamiento estaba decidido a aceptar, el pueblo dijo que no, se armó un jaleo importante, y finalmente se construyó en Valdemoro, que se llevó las contraprestaciones que se ofrecían, y además, consiguió que desde el casco urbano de Valdemoro no se pueda llegar a la cárcel. ¡Mal negocio hicimos los pinteños! El caso es que al final, todo es una cuestión de rivalidad, que llega incluso hasta el punto de disputarse el honor de tener el centro de España en su término municipal. Según unos, el Cerro de los Angeles en Getafe, según otros, el Cerro del Telégrafo en Valdemoro, y según otros, la esquina "sata" en Pinto, donde hay un monumento. ¿Dónde está realmente? Probablemente en ninguno de los tres lugares, ya que la Tierra se mueve, y si no que se lo pregunten a los chilenos en los últimos días. Pero, ¡qué bonita es la disputa con el pueblo de al lado!


1 comentario:

  1. El centro de la península
    ibérica está en Pinto sin ninguna duda, les recomiendo que vean el video en youtube"Vivir en Pinto"que habla de ello

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